María Magdalena perdida en su dolor. Está preocupada y sufre así como lo hacen muchos cuando su mundo se viene abajo, sienten que no encuentran justicia en su dolor. Este sufrimiento amargo está a punto de convertirse en un gozo exhilarante y esta tan cerca que llegara en un instante.
De hecho, el nombre de "María" acaba de salir de los labios de Jesús. Aquí en este espacio se encuentra el momento crucial que cambiara sus emociones. María es el nombre que ella reconoce como suyo, y en su nombre se encuentra su identidad, la razón de ser de este sufrimiento y que ahora se le da reconocimiento. Ya no será tan solo su nombre, ahora será también todo su ser y el porqué de su sufrir .
Cuando nosotros sufrimos, somos como la María de este cuadro y no nos hemos dado cuenta que nuestro nombre y lo que hemos pasado ya salió de la boca de Dios. Que paz y felicidad tendremos cuando al fin podamos escucharlo claramente en nuestros días y que al fin podamos identificar la justicia y la misericordia.
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Traducido al Español por Rosie Aguilar
