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Santa María, reina del cielo y de la tierra,
de quien las oraciones son las más agradables ante Dios,
Habiendo vivido como la más perfecta de los discípulos de Cristo,
te pedimos que desde tu Inmaculada concepción
hasta tu gloriosa asunción,
ruegues por nosotros
con la pureza de tu corazón tan lleno de amor,
Que Dios en su gran misericordia, nos cuide,
en este valle de lagrimas
hasta llegar a la paz eterna.
María, Reina de la familia y reina de todos los pueblos.
Ora pro nobis. Ruega por nosotros.
Derechos reservados 2002-2024 – Irene Thomas
Traducido al Español por Rosie Aguilar
