Dejad que los niños se acerquen a mi
Los niños le dan la bienvenida a Jesús y el los invita a que se acerquen a él. Lo rodean entre todos demostrándole amor sin inhibiciones ; los niños son muy humildes, son sinceros a su naturaleza, ya sea al estar listos para ver quien sigue de pasearse en los hombres de Jesús o cuando no le quitan la mirada y quedan fascinados con El . Ellos no son orgullosos y no esconden sus sentimientos.
Los niños son absorbentes y dóciles y por eso Jesús condena a aquellos que les enseñan a pecar. Debemos de quererlos y cuidarlos, mientras que al mismo tiempo estamos aprendiendo de ellos.
Jesús pone a los niños ante nosotros, sus discípulos, como modelo para que los imitemos. Debemos de imitar al niño, cambiar de forma de ser, y convertirnos en pequeños niños de espíritu.
El Reino del Cielo le pertenece a los que son como ellos. Nos hacemos como niños al arrepentirnos y cuando humildemente ponemos al descubierto lo que verdaderamente somos ante el Padre Celestial, y nos hacemos dóciles en nuestra formación a su Santa Voluntad.
Derechos reservados 2002-2024 – Irene Thomas
Traducido al Español por Rosie Aguilar
